ÙNETE a la comunidad de SILWY en FACEBOOK! http://www.facebook.com/groups/323375691027181/

Capitulo 35 ♥ Segunda Temporada ♥

Capítulo 35 ♥

Analy y tú se fueron a sentar a las orillas de la piscina del hotel. Había una que otra gente disfrutando del agua tibia, y otras más almorzando en las mesitas del jardín. Querían meterse a tomar un baño, pero a ninguna se le ocurrió traer su traje, y mucho menos habían pensado en ir de compras para conseguir uno.

Realmente, su cabeza no estaba en su lugar. Analy pasaba sus últimos días en Canadá antes de su retorno a Inglaterra y ya parecía que la echabas de menos. A ella, por el contrario, le preocupaban otras cosas. Por supuesto le entristecía tener que marcharse, pero al mismo tiempo ansiaba irse y encontrarse con su encantador hogar del otro lado del océano. En realidad ya lo había asumido. En lo que no paraba de pensar era en su plática con Marilu temprano por la mañana. Una charla que hablaba de ti y Nick.

Tu: Estás muy distraída.

Analy: [sacudiendo la cabeza] Perdón, es que… Estaba ida [sonrió] Tendríamos que ir con los muchachos. El concierto ya es hoy y todavía no nos invitan formalmente.

Tu: [enrojeciste] Bueno… Yo quería que Nick viniera a buscarme él sólo.

Analy: [rió] Seguramente está algo ocupado. Ven, vamos. [tendiéndote la mano]

Salieron de la zona recreativa en dirección a los cuartos. Analy llamó por teléfono a Kevin para saber dónde estaban y les dijo que llegarían más tarde para recogerlas y llevárselas al concierto de Kings Of Leon. Así pues, tenían toda la tarde para ustedes solas y Marilu no tardó en reunirse con las dos.

Después de la comida, Nick te llamó por teléfono.

Tu: ¿Bueno?

Nick: Hola, hermosa.

Tu: Hola Nick [sonrojándote] ¿Cómo estás?

Nick: Muy bien, gracias ¿y tú? ¿qué haces?

Tu: También bien. Estoy con las chicas, viendo unos vídeos en la lap.

Nick: Oh, qué bien. Nosotros seguimos acá grabando una entrevista para un show de tv. Me encantaría que nos hubiesen acompañado, a Joe le ha pasado de todo hoy.

Tu: Jaja ¿Cómo qué?

Nick: Pues tan sólo salimos y se tropezó. Ha estado contando unos chistes horribles y tuvieron que conseguirle una camisa extra porque el niño, bueno, digamos que no deja de sudar.

Tu: Ay, Nick. A cualquiera le pasa.

Nick: Pero luego dijo que se le olvidó ponerse desodorante, y no estoy seguro de que sólo lo hubiera dicho en broma…

Tu: [riendo]

Nick: Okay, pero olvídate de eso. En realidad lo que quería era invitarte al concierto de Kings Of Leon, que era una sorpresa, pero que seguramente ya te enteraste.

Tu: Podemos hacer como si no supiera nada. [sonreíste]

Nick: Jaja, si quieres. Por mí no hay problema.

Tu: Empezaba a preocuparme. [confesaste] Pensé que olvidarías llevar a tu novia.

Nick: Nunca te olvidaría, _________. Estás en mis planes incluso antes de que los tenga previstos.

Tu: Awn. Imagina que te doy un beso ahora ¿sí?

Nick: Oh… uhm. Imagina que te lo devuelvo, y que te abrazo y te tomo de la mano…

Tu: Sería mejor que estuvieras aquí, pero puedo conformarme con que nos veamos en la noche. [interrumpiste] ¿A qué horas llegan?

Nick: La verdad no sé, pero será antes de siete. Todavía tienen tiempo para arreglarse y hacerse todo lo que las chicas hacen antes de una cita. [burlón]

Tu: Ja-ja. Qué risa.

Nick: Por lo menos a mí me gusta que te pongas guapa. Más de lo que ya estás, porque ya es mucho. ¿Cómo puede haber tanta maravilla en una persona, ________?

Tu: De la misma manera en la que una se enamora de un arbusto andante, con ojos color chocolate y lunares por doquier.

Nick: Pues eso explica muchas cosas [rió]

Tu: Está bien. Entonces ¿nos vemos más tarde?

Nick: Sí. Cuídate, te amo.

Tu: Te amo.

Nick: Muchos besos.

Tu: Adiós, Jerry.

Nick: ¿Por qué me dices Jerry?

Tu: Porque sé que te molesta…

Nick: Suena bien si tú lo dices.

Tu: ¿No íbamos a colgar?

Nick: Sí,pero me gustaría hablar contigo día y noche…

Tu: Romántico, vuelve al trabajo. Que sea tu novia te distrae mucho ¿sabes? Hasta en la noche.

Nick: [entre risas] Adiós _________.

Marilu y Analy se echaron una mirada, pero no comentaron nada. Tú, en cambio, estabas en las nubes.

[–En el concierto–]

Sus asientos estaban apartados, casi escondidos, del resto. No importaba que no estuvieran completamente cerca, porque a pesar de escuchar y cantar las canciones del grupo musical, no dejaban de conversar entre ustedes, sacando siempre una broma que podía estar poco o muy fuera de lugar, riendo, y cómo no, dejándose querer.

Nick te tenía abrazada a tus espaldas, rodeándote la cintura con dulzura. De vez en cuando bajaba su cara sólo para rozar su mejilla contra la tuya y murmurarte cosas al oído. Hubo un instante en el que no pudo evitar la tentación de besarte el cuello e incluso, mordisquearte con suavidad la oreja.

Tu: Eres un tonto [con cosquilleos]

Nick: ¿No te gusta?

Tu: Sí, claro… [roborizada] Es que me dan cosquillas. Y se siente curioso.

Nick: A mí me gusta tu risa.

Tu: Y a mi me gustan tus besos [recargando tu cabeza hacia atrás, en su hombro]

Nick: Oh, oh. Escucha…

Tu: Nick, no me sé ni la mitad de las canciones… [avergonzada]

Nick: Ya me di cuenta [rió]. Ésta se llama True Love Way. Me gusta mucho una parte que dice… Espera que te la canto al oído.

Tu: Okay [asentiste]

Nick: We’d be so free, [cantándote al oído] happy alone; sharing a smile, so far from home. And we would laugh, laugh till we cried. Making up songs…

You’re making me lie, decía el último verso, pero Nick no quiso cantarlo.

Tu: Lástima que no sea una canción con un final feliz.

Nick: Happy alone…

Tu: [suspiraste] Cantas hermoso.

Nick: [sonreíste] Gracias. No muchos me dicen eso.

Tu: [reíste] Eres un presumido.

Nick: ¿Te estás divirtiendo?

Tu: La verdad, sí. Es la primera vez que me traes a un concierto que no sea tuyo. Estoy muy a gusto.

Nick: Me alegro. Es de las pocas veces que tenemos la oportunidad de asistir a conciertos de otros artistas… Y me alegra que lo haga contigo.

Tu: [estrechándole sus brazos, que te ceñían de la cintura, con ternura] Me saco la lotería a tu lado, Nick. En serio no me importaría irme lejos contigo y sentirme libre. Reiríamos hasta llorar… ¿y qué más?

Nick: Compartiríamos una misma sonrisa.

Tu: Eso. Y también un corazón…

Nick: Yo lo compartiría todo contigo. De pies a cabeza. Mi tiempo, mi corazón, mi alma… A veces me gustaría que fuésemos uno sólo.

Tu: ¿Cómo que uno sólo?

Nick: Uno sólo. Una sola esencia. Que nada pueda separarnos, literalmente.

Tu: Oh… Bueno. [dubitativa] Si tú quieres.

Nick: ¿A ti no te gustaría?

Tu: Por una parte sí, mas sería acaparar toda tu vida. [intentaste explicar] Estarías atada a mí. No podrías hacer nada tú sólo.

Nick: Ni tú tampoco… [murmuró para sí]

Tu: Cada uno necesita su espacio ¿no? Pero no me malinterpretes [aclaraste con prisa, volviéndote hacia él]. A mí no me importaría pasar el resto de mi vida a tu lado, como ahora estamos, juntos… Pero créeme, acabarías hartándote de mí.

Nick: Te entiendo perfectamente. [respondió con una sonrisa y una mirada intensa] Y, siéndote sincero, lo que menos quiero es tenerte atada hacia mí. Quiero que vueles alto. Quiero que vivas una dichosa vida por el camino que tu elijas. Independiente, como tú siempre te has defendido.

Tu: ¡Vale! ¿Por fin aceptas que no dependo de nadie? ¿Que puedo hacer las cosas por mí solita? ¡Esto sí que hay que celebrarlo!

Te pusiste de puntillas y le besaste con dulzura. Nick no hizo más que corresponder con el corazón saliéndosele del pecho. Terminado el beso, hundiste tu rostro en su pecho, sujetándole fuerte alrededor del torso. Él hizo lo propio, entrelazando sus dedos entre tus largos bucles.

Nick: Eres una hermosa mujer, _________. Una mujer que no depende de nadie. Ya lo he comprendido.

[–Al día siguiente–]

Antes de mediodía, Analy ya tenía las maletas listas. Todos se fueron al campamento para filmar a excepción de ustedes dos y el Señor Jonas y Frankie. Desde muy temprano por la mañana, las despedidas se hicieron notar. Marilu hizo lo posible por acompañarlas al aeropuerto, pero debía trabajar con la producción. Los chicos también desearon ir, pero se topaban con el mismo problema. Analy prometió no llorar y sin embargo, tampoco pudo. Marilu acababa de romper en lágrimas.

Marilu: Eres mi mejor amiga, tonta. [abrazándola fuerte] Te voy a extrañar demasiado.

Analy: Gracias por hacerme llorar, Marie [rió]. También te echaré de menos. Tus bromas, tus caras, tus tonterías.

Marilu: Ya, admite que me amas [entre risas]

Tu: Ustedes dos. Ya paren que me van a hacer llorar también [aguantándote].

Analy: Ven acá, _______ [abrazándote a ti también]. Cuando esté vieja me voy a acordar de ambas, par de locas.

Marilu: ¿Aunque tengas alzheimer y se te olvide cómo ir al baño?

Analy: Sí, probablemente… [se echaron a reír]

Con los hermanos Jonas fue igual de emotivo, en especial con Kevin. Si bien ninguno de los tres lloró, era bastante obvio que les hacía ilusión que ella no se marchase. Joe cortó la escena con una broma para levantar los ánimos, Kevin la estrechó fuertemente diciéndole cosas al oído y Nick se despidió con breves palabras llenas de cariño.

Analy: Gracias, Nick. Lo aprecio bastante.

Nick: Ya sabes dónde y cómo encontrarnos. Espero que sigamos en contacto.

Analy: Claro. Sí… [lo miró] ¿Puedo decirte una última cosa? [murmuró]

Nick: Sí ¿qué pasa?

Analy: Yo espero que tú estés haciendo lo correcto.

Nick: ¿De qué?

Analy: ¿De qué otra cosa, Nick?

Nick: [desconcertado]

Analy: No quiero escuchar malas noticias.

Nick: Descuida. [carraspeó]

En el aeropuerto, el señor Kevin y Frankie las dejaron un tiempo a solas, mientras se despedían con más libertad.

Analy: El señor Jonas no debió de haber venido…

Tu: Bienvenida a mi mundo, donde todo lo que hace, es tratar de cuidarnos. [sonreíste]

Analy: Prométeme que vas a cuidarte tú ¿sí? No dejes que nada te deprima.

Tu: ¿Por qué?

Analy: Porque toda fortaleza tiene su punto débil y hay una grieta que en ti nunca se borra.

Tu: [frunciste el ceño] ¿Y a qué viene esto?

Analy: A que Nick y tú tienen planes, ________… Y no sé si sean para bien.

Tu: ¿Cómo?

Analy: Tú no quieres irte con él al tour ¿verdad?

Tu: Pues no pero…

Analy: Y a mí me parece perfecto, amiga. Porque este tipo tiene una vida que ya sabes cómo te pone de cabeza. A todas.

Tu: No te preocupes. No pasará nada.

Analy: De veras eso espero. No quiero un corazón roto por allí.

Tu: ¿Corazón roto? [sombría] Ninguno, Analy. [poniéndote seria] Te lo juro. Yo ya no estoy para eso.

Analy: [sonrió] No pienses que sospecho algo. Quiero asegurarme de que estés bien ¿de acuerdo? Eres como mi hermana.

Tu: Igual tú, Anny. Dile a Nathanael que tiene todos nuestros permisos para andar contigo.

Analy: [riendo] ¡Gracias! Eso significa mucho.

Tu: Jeje…

Analy: Adiós [te abrazó] Te quiero, _________. Juntas por siempre.

Tu: Obvio ¿qué otra opción hay? [devolviéndole el abrazo]. Llegas y nos mandas un mensaje. Y apartas esa webcam para nosotras ¿sí?

Analy: Sí.

Las lágrimas empezaron a brotar.

Tu: Gracias por todo, Analy. Ten un buen viaje. Me saludas a tus papás. Estudia mucho y escribe un libro ¿va?

Analy: Ya está [separándose de ti]. Las veo dentro de unos meses… Oye, ni siquiera… ¡Se van a pasar rapidísimo!

Tu: ¿Para la boda?

Analy: Exacto.

Tu: Supongo que sí. [te encogiste de hombros] En serio necesitamos que vengas.

Analy: No voy a perderme la boda de mi ex [bromeó]. Quizás traiga a Nathanael para entonces.

Tu: Los esperaremos, pues.

Analy: [dándote un beso en la mejilla] Nos vemos. Te quiero.

Tu: Yo también ¡Adiós!

Unos minutos después, Frankie te prestaba su videojuego de vuelta al hotel. Mataste a unos cuantos zoombies pero no pudiste quitarte de la cabeza que Analy acababa de irse y que decidió el último momento para advertirte sobre Nick.

Si ella tenía razón, pensaste, tú cumplirías tu promesa.

[–En la madrugada–]

Tu: ¿Nick?

Te volviste hacia todos lados, buscándolo con la mirada. Era de madrugada y a Nicholas se le había ocurrido tener una cita nocturna contigo, en la piscina, mientras todo el mundo estaba dormido.

– Estás loco – le dijiste cuando te llamó por la tarde noche.

– Tú fuiste la que me dijo que quería meterse al agua.

– La alberca estará cerrada – objetaste.

– No si yo la abro para nosotros – contradijo Nick, sonriente.

Ahora estabas allí tú, en medio del jardín de juegos con unos pantalones cortos de licra y una camiseta café, convencida de que si lograban entrar, también entrarían al agua. Te pusiste una sudadera encima para mitigar el frío de la noche y deseaste que a él se le ocurriera traer un par de toallas para secarse.

Por suerte, cuando lo viste venir, traía ya un bulto consigo.

Nick: Las tengo [enseñándote las llaves]. ¿Cómo estás? ¿Tienes sueño?

Tu: Un poquito.

Nick: [te besó] Ahorita te despierto.

Tu: [sonreíste] ¿Cómo las conseguiste?

Nick: [abriendo la puerta] Favores. [sin darle importancia]

Deslizó la puerta, que en realidad era un gran ventanal, y se hizo un lado para cederte el paso con un ademán caballeroso.

Nick: Primero las damas.

Tu: Me enojaré contigo si me tiras al agua después de esto ¿eh? [amenazaste mientras cruzabas el umbral]

Nick: No pensaba hacerlo, pero gracias por la amabilidad. [con sorna]

Nicholas cerró la puerta y corrió unas cortinas.

Nick: Para que nadie nos vea [explicó ante tu duda]

Tu: No creo que a alguien se le ocurra venir.

Nick: ¿Adónde crees que se escapan de vez en cuando Joe y Marilu?

Tu: [boquiabierta]

Nick: Pero esta noche es sólo para ti y yo [cogiéndote de la cintura]

Tu: Me siento halagada.

Nick se acercó aún más para besarte. Tú le rodeaste el cuello con los brazos dejándote caer completamente a sus deseos. El agua de la piscina despedía destellos azulados que iluminaban el sitio de una manera espectacular y romántica. Todo lucía perfecto.

Él te acarició con ternura, palpó tu cuerpo con delicadeza, besó tus labios con suavidad y bajó hasta tus hombros sin separarse ni un centímetro de tu contacto. Su aroma te fascinaba y cada apasionante roce que tenías a su lado te enloquecía hasta el éxtasis. Era la primera vez que se permitían el lujo de hacer algo como aquello. No había límites entre ambos, sobre todo porque se respetaban, y la cosa era que en ese preciso instante, sabían hasta dónde llegar y sabían que lo que sus sentimientos acarreaban era correcto.

Tenían confianza, tenían intimidad… Y su amor era sincero y puro.

Nick: Me encanta estar contigo. [susurró a tu oído]

Tu: [suspiraste] A mí también.

Nick alejó sus manos de tus posaderas, con lo que te estremeciste. Intercambiaron una larga mirada.

Nick: ¿Te parece si entramos?

Tu: Perfecto [sonreíste, complacida]

Tomados de las manos, se pararon en la orilla de la alberca, vacilantes.

Nick: ¿Crees que esté fría?

Tu: Tú no te atrevas a aventarme ¿sí? [poniéndote de cuclillas y hundiendo la mano] Bueno, no está muy fría, creo… ¡AH!

Quedaste empapada. Nick acabó dando un salto para meterse a la piscina, salpicando todo a su alrededor. Cuando salió del agua, sacudió su cabeza y se talló los ojos.

Nick: ¡Ven! ¡No está tan mal!

Pero tú no reaccionaste. Nick se había quitado la camisa.

Y tu mente empezó a trabajar a mil por hora ;)

Tu: [mirándote la ropa]

Nick: No importa que te mojes un poquito [te animó] Vamos, yo te atrapo desde aquí [estirando sus brazos]

Tu: [pensando en si te importaría «mojarte un poquito»] De acuerdo. [azorada]

Te diste media vuelta y te sacaste la sudadera para dejarla a un lado. Cuando volteaste decidida a saltar, Nick te sonreía ampliamente sin apartar su mirada de encima, con las mejillas sonrosadas.

Tu: Ya deja de poner esa cara de tonto.

Nick: ¿Cuál? [sin reaccionar]

Resoplaste con los ojos en blanco, resignada. Corriste hacia la orilla y te tapaste la nariz a mitad del brinco.

Si tu vestido se te pegaba al cuerpo o se te despegaba flotante de él, ya no interesaba. Nicholas te había tomado entre sus magníficos brazos desnudos envolviéndote nuevamente en otro apasionante beso, saciado de placer.

Y hasta el amanecer, pasarían una velada única e inolvidable; una que frecuentaría sus más maravillosos sueños de amor.

[–Al día siguiente–]

Joe: Ya ¿qué es lo que te pasa? Amaneciste de peor humor que de costumbre, hermano.

Nicholas gruñó. Claro que estaba de muy mal humor ¿por qué había necesidad de que se lo recordaran? En especial Joe, porque él intuiría que algo andaba mal y a Nick eso no le causaba nada de gracia. Sus problemas eran sus problemas por un motivo en concreto, y lo menos que deseaba era confundirse más con respecto a una decisión que ya había tomado. Sin embargo, era imposible sentirse culpable y preguntarse, una y otra vez, si estaba haciendo lo correcto.

La noche anterior había sido mágica. Nunca olvidaría cómo se entregaron uno al otro de una forma que, si no fuera por aquel límite que ambos se imponían precisamente porque se querían, habrían despertado debajo de las sábanas, con la esencia del otro muy penetrante en sus cuerpos. Desde luego, qué mejor forma de alcanzar la plenitud de su amor que compartir la experiencia, compartirse el uno al otro, despertar sensaciones juntos, unidos, haciendo el amor… Era la cúspide de todo el recorrido, el roce de la ola más alta del mar con las nubes, el fuego ardiente en medio del hielo.

Era todo aquello que Nick estaría dispuesto a experimentar contigo. Lo único que le faltaba por demostrarte. El momento en el que finalmente sería completamente tuyo.

El suceso que esperaría por años con tranquilidad. Hasta que ambos estuviesen preparados. Hasta que el matrimonio los arropase en su seno. Luego de haber dicho, por siempre y para siempre…

Un sueño. Sí, eso le parecía un sueño. Una ilusión. Casi una alucinación.

Algo inalcanzable… No. No, claro que era alcanzable. Contigo, todo era posible. Todo. Absolutamente todo.

¿Entonces por qué iba a hacerlo? ¿Por qué sentía que el tiempo se le deslizaba por los dedos? ¿Por qué todo parecía una voluta de humo a la que no podía aferrarse?

Y se sintió sucio y mezquino. Desamparado. Egoísta. Sobretodo porque sus elecciones, buenas o no, te acarreaban sin salida. Sin opciones. Porque todo lo que hacía lo hacía por ti. Y quizá eso actuara como una excusa; una manera de explicar y dar por sentado el camino que estaba tomando. De dejar una vía libre. De hacerte feliz.

Se miró las palmas de sus manos, las yemas de sus dedos… Habían recorrido tu cuerpo entero. Habían acariciando tu rostro, tu espalda, tu cadera,  tu vientre, tus piernas, tu pecho… Sus labios habían besado tu frente, tus ojos, tu boca, tu cuello, tus hombros, tus brazos… ¿Cómo no iba a amarte? ¿Cómo no iba a ser capaz de renunciar a todo para que alcanzases tu felicidad?

Y esa mañana se levantó con remordimiento. Y por eso estaba de mal humor. Porque te lo daba todo. Porque estaba perdidamente enamorado de ti, enloquecido, incapaz de ceder ante la indiferencia. Porque necesitaba sentirte cerca, porque no sabía cuánto tiempo quedaba. Porque lo que sentía era real, y de verdad quería disfrutarlo, porque se trataba del presente… Y al menos, por una noche, necesitaba olvidarse del tormento del futuro. Del futuro que él ya había previsto para ambos. Del futuro que presagiaba un fin, después de todo.

Era un remordimiento y una culpabilidad terribles. Porque te daba alas. Incluso él extendía sus propias alas… Pero la realidad le caía de golpe. Y allí estaba la cuenta regresiva.

– ¿Nick?

Joe: Oh. A ver si a ti sí te habla con cariño, ________. [masculló mirándolo de soslayo]

Tu: ¿Qué te ha dicho?

Joe: Cosas feas [poniendo una cara de tremenda tristeza]

Tu: Marilu está esperándote en el salón. Seguro ella te pone mejor. [le guiñaste el ojo]

Joe: Nos vemos en un rato, brujita. [se despidió de mejor humor]

Tu: ¿Nick? [volviste a llamar]

Nick: [saliendo de su ensimismamiento] Hola.

Tu: ¿Estás bien?

Nick: Por supuesto.

Posó una sonrisa tranquilizadora e hizo un ademán para que te sentases a un lado suyo. Aceptaste, agradecida, y tomaste asiento justo a un costado. Él te rodeó los hombros con el brazo y tú te recostaste contra él, echando un suspiro.

Tu: Ayer me la pasé fantástico.

Nick: Yo también [con la voz ahogada]

Tu: Aunque tengo un poco de sueño… [confesaste con rubor]

Nick: [notando tus gestos] Eh, ¿por qué pones esa cara?

Tu: Es que estuve pensando varias cosas cuando volví al cuarto… [agarrando un pedazo de tu blusa, con timidez]

Nick: ¿Cómo qué?

Tu: No sé. Fueron muchas cosas.

Nick: [sonrió] Déjame ver si puedo adivinar: Estabas pensando en mí.

Tu: [esbozando una amplia sonrisa] Pues no iba a pensar en cucarachas, señor sabelotodo.

Nick: Ya bien [divertido] ¿En qué pensabas?

Tu: En que cada vez me siento más cercana a ti. Vaya, ¿cómo explicarlo? ¿No te levantaste esta mañana sintiéndote extraño? ¿Como si de pronto vieses todo diferente, más bonito?

Ciertamente, tan sólo al despejarse unas horas antes todo le pareció mucho más amargo debido a que en su interior estaba esa culpabilidad que le carcomía desde muy temprano. No obstante, miró directamente tus ojos oscuros que contenían un arcoiris de emociones y tuvo que reconsiderar sus pensamientos. En definitiva, la noche anterior se había acostado con una amplia sonrisa sintiéndose un hombre nuevo y pleno. En sus sueños nada lo perseguía. Y al amanecer, por lo menos mientras el sopor desaparecía, memoró los acontecimientos en la piscina y siguió sintiéndose afortunado. Diferente.

Nick: Creo que sé exactamente a lo que te refieres.

Tu: Quizás te parezca un poco ridículo, [empezaste, ruborizada] y debo de confesar que me ha parecido algo infantil, pero es una idea…

Nick: Dímelo. [alentó]

Tu: Es que me siento como si acabara de tener mi primer beso. [murmuraste, apenada]

Nick parpadeó unos segundos, asimilando lo que implicaba tu aseveración.

Tu: Ya sé que es una tontería, pero sentí que necesitaba decírtelo…

Nick: No es ninguna tontería. [cortó serio] Yo también siento algo similar.

Tu: ¿En serio?

Nick: [asintió] Lo que pasa es que pasamos por algo que nunca habíamos pasado. ¿No? Yo nunca… [tragó saliba, azorado] Nunca había tocado a una mujer así.

Nick desvió su mirada con las mejillas encendidas. Tú no fuiste la excepción y una escena hizo presencia en tu memoria.

Tu: Pero no ha sido como el otro día ¿sabes? El otro día en tu cama… Cuando, bueno, íbamos a…

Nick: [volviéndose] No, para nada. Esa noche fue de locos [expresó casi riéndose], pero ayer… Ayer fue fascinante. Ayer de verdad me sentí conectado contigo. El otro día ni siquiera tenía mi cabeza en su lugar.

Tu: Y sin embargo fue hace poquito, y concluimos que no estábamos listos para eso, y ayer…

Nick: [escuchándote con atención]

Tu: Ayer… [buscando las palabras precisas] Sabíamos lo que hacíamos. Y nos respetamos. Y aún así, traspasamos ciertos muros…

Nick:  ¿Estuviste pensando en todo esto?

Tu: Es que no puedo sacármelo de la cabeza. [susurraste, inquieta] Si mañana hemos de separarnos independientemente de las razones, mi corazón se llevará estos recuerdos conmigo.

La mirada de Nick se ensombreció.

Tu: Y ha sido especial. Mucho. Y quiero que sepas, Nick, que estoy pasando los días más felices de mi vida. No sé por qué, pero se me ha hecho una eternidad desde que todo esto comenzó. Y no me refiero a cuando volvimos [añadiste], sino, a cuando nos vimos por primera vez, en el baile de antifaces.

Nick: Estás consciente de que te he amado desde entonces ¿verdad? [dijo, no sin esfuerzo, con una intensa mirada que no mentía]

Tu: [asentiste]

Nick: Perfecto. Recuérdalo por siempre.

Se inclinó hacia ti y te besó en la frente. Tú cerraste los ojos, disfrutando de su calidez, mientras lo estrechabas por la cintura.

Tu: Descuida. Hay muchas cosas que recordaré hasta el último día de mi vida.

Nick: Yo podría dedicarte mi último aliento.

Tu: No digas eso, a lo mejor te casas con una chica mucho más bonita que yo. ¿Qué le dejarás a ella?

Nick: Mejor me lo pienso después.[admitió, eludiéndolo] Lo importante es que, justo ahora, todos mis suspiros son tuyos ¿no?

Tu: [sonreíste] Claro. Lo importante es el ahora.

Y antes de que aporrearan la puerta y les recordaran que la camioneta ya se iba al campamento, se besaron dulce y tranquilamente, en el sofá de la suite.

[–Narro Yo–]

Una semana más transcurrió. Fue una semana diferente, porque a la mayoría de ustedes les pesó la ausencia de Analy, quien los llamó unas horas después de haber llegado a Inglaterra. De ahí en más, su comunicación constaría del correo electrónico. Hicieron una videollamada el miércoles siguiente, y Marilu y tú prometieron que si ella se mudaba en definitivo a tierras británicas, ambas tendrían excusa para irse de vacaciones algún verano.

Tu compañía era Marilu, pero desafortunadamente ella debía trabajar sin interrupciones. Por lo tanto, vagabas de un grupo a otro, como una nómada buscando dónde encajar. Lo bueno era que encajabas en cualquier parte, porque todos a quienes les hablabas eran siempre muy simpáticos y amables. Era de esperarse que te mudases con Dakota y el resto de las bailarinas pronto, pero preferiste no comprometerte con nadie, porque Marilu seguía siendo tu compañera de cuarto y en cuanto ella se tomase un descansito de su trabajo, deseabas estar disponible para ella.

Sin embargo, había siempre alguien a quien esperabas con desesperación, y era a tu novio.

Nick hacía maravillas con las escenas para acabarlas lo más rápido posible e ir contigo. De igual manera, asististe a cada vez más tomas que antes, sin o con él en ellas, porque era más divertido que estar sola pensando en la nada. Una tarde repararon en que el día siguiente se cumpliría un mes desde que volvieron a su relación, pero les pareció todo un lío celebrarlo.

Tu: Habría que dejar las cosas en claro: no es la primera vez que volvemos a andar juntos.

Nick: No.

Tu: La primera ocasión fue… ¿En Junio? No. [frunciste el ceño]

Nick: Fue unos días antes de tu cumpleaños. [murmuró, incómodo]

Tu: ¡Ah, sí!

Nick: ¿Se te hace bien contar las veces en que hemos roto? [haciendo una mueca]

Tu: No estoy contando las veces en que lo innombrable ha sucedido. [dándole un poco de gracia al asunto] Estoy tratando de llevar un calendario de nosotros. Después de eso, celebramos nuestros mesversarios desde el primer día que nos hicimos novios.

Nick: Uhm, sí.

Tu: Hicimos como si nunca hubiéramos roto.

Nick: Yo aún tengo esa idea.

Tu: Y después pasó lo de Nueva York… y volvimos a ser novios. Ya. Mi duda es ¿cuándo vamos a celebrar nuestros aniversarios y todo lo demás? No es que hayamos tenido una relación estable siempre, y tampoco es un secreto que hubiésemos estado con otras personas durante alguno de esos meses pero… [con rubor] Me gustaría saber qué fechas son importantes para nuestro noviazgo.

Nick: Cada día es importante.

Tu: Sí, Nick, lo sé… Pero me gustaría atenerme a algo. ¿A ti no?

Nick: ¿Y todo esto es porque mañana cumplimos un mes de volver?

Tu: No exactamente, pero es una duda. Igual, si simplemente dejamos las fechas a un lado sin darles importancia pues…

Nick: [sonrió] Qué complicada eres.

Tu: Nick [echándole una mirada de reproche]. Basta. Es que para mí es importante.

Nick: Para mí también.

Tu: ¿Entonces podrías hacerme el favor de ponerme atención?

Nick: Escucha, yo prefiero dejar a un lado el hecho de que nos hemos separado en alguna ocasión, porque son recuerdos malos.

Tu: Entiendo.

Nick: Y como nos hemos contentado después de las rupturas, significa que siempre ha existido algo, que nunca ha desaparecido.

Tu: Correcto.

Nick: [quedándose en silencio]

Tu: ¿…y a qué vamos con eso?

Nick: Estoy pensando en ello.

Tu: [mirándolo fijamente]

Nick: [sonrió] Ya está.

Tu: ¿Qué cosa está? [confundida]

Nick: Mira, sobre todas las demás, hay varias fechas que destacan para mí.

Tu: ¿Cuáles? [interesada]

Nick: En primer lugar, la noche de la fiesta de antifaces.

Tu: Claro.

Nick: Después, cuando nos besamos por segunda vez, o por primera. En nuestra primera cita en la playa ¿recuerdas?

Tu: Por supuesto [sonreíste, emocionada]

Nick: La fecha en que nos hicimos novios, y no sólo por eso, sino porque también supimos que nos conocíamos desde hacía dos años entonces,

Tu: ¡Las cadenas! [exclamaste]

Nick: Exacto [risueño]. 

Tu: ¿Y luego?

Nick: Y ya. [se encogió de hombros]

Tu: Bueno, me parece convincente. La verdad es que fueron días mágicos.

Nick: Y han habido muchos otros, _________, habrá que tenerlos en cuenta. Como nuestro mesversario, tu mismo cumpleaños, la navidad pasada, cuando te dediqué la primera canción, cuando escribimos la nuestra, el día del amor y la amistad, el inicio del tour…

Tu: Haríamos una lista bastante larga [comprendiéndolo].

Nick: Mas, a lo que quiero llegar, es que se supone que celebramos nuestro sentimiento común ¿no? Nuestro amor.

Tu: Sí. Eso se hace [asentiste sin apartar tu atención de él]

Nick: No celebramos fechas.

Tu: No… Supongo que no.

Nick: Así pues [te tomó de ambas manos], yo siento este amor desde que tenía trece años. ¿Y tú?

Tu: Yo también [sonreíste]. Desde el 2006.

Nick: Así que pienso que es justo celebrar aquellas fechas… El día en que nuestro amor nació, el día en que por fin lo aceptamos y el día en que nos descubrimos a nosotros mismos y en que decidimos empezar nuestra historia.

Tu: Vaya ¡son tantas cosas! ¿ahora entiendes cuando te digo que para mí ha pasado una eternidad?

Nick: Han sido tres años desde la primera vez… [suspiró]

Tu: Ahora la cosa es… que entonces no haremos nada mañana ¿verdad?

Nick: [te miró] ¿Por qué no? Hay un restaurante bonito al que no has ido. Me gustaría llevarte.

Tu: ¿De veras?

Nick: Oye [intentando parecer serio] ¿por qué sospecho que has iniciado todo esto para que al final te invitase a salir?

Tu: [echándote a reír] ¿Me creerías capaz?

Nick: Yo quería invitarte a salir, de todos modos [terminó sonriente]

Tu: [le abrazaste] Te quiero mucho, Nick. Ojalá todos los días fueran tan lindos como estos.

Nick: Preciosa [murmuró a tu oído], hay algo que nunca va a cambiar, y será que pase lo que pase, las cosas entre nosotros serán siempre lindas.

Al día siguiente, por la noche, Nick iría a recogerte para llevarte a una cena en un restaurante elegante de la ciudad. Así que Marilu y tú estuvieron toda la mañana de compras, recuperando las horas perdidas, y buscando con determinación un bonito vestido que fuera barato y alusivo a la ocasión.

Tu: Si tuviera mi guardarropa de siempre, no habría problema… ¿Te acuerdas de ese vestido morado con la flor en el hombro?

Marilu: Olvídate de él. ¡Mira esa preciosura que dice  «liquidación«!

Horas más tarde, lucías un minivestido azul, con un fondo negro y un moño del mismo tono en la cintura. Te dejaste unos cuantos bucles y Marilu te planchó el fleco. Te pusiste tacones altos y frente al espejo una mueca de tristeza opacó todo lo demás. Llevaste tu mano al cuello y suspiraste. Había algo ahí que no acababa por gustarte, y era el hecho de que una joya plateada remplazaba la larga ausencia de una cadena que se adhirió a tu ser por mucho tiempo, y que ahora no sabías dónde estaba.

Casi ni la habías extrañado pues aquél día que decidiste devolverla a su dueño, era porque sabías que con ello cerrabas una historia y continuabas tu vida sin él. Y eso hiciste, porque para entonces ya tenías superado el asunto y solo tuviste que acostumbrarte a no portarla… Pero ahora que su relación latía con más fuerza que nunca, te preguntaste qué habría ocurrido con ella.

El día anterior, Nick hubo evocado los días especiales, y mencionó «la fecha en la que nos hicimos novios… supimos que nos conocíamos desde hacía dos años». Tú chillaste «¡Las cadenas!» porque sin ellas, probablemente hubieran eludido la verdad por mucho más tiempo. Porque  ellas consistían en la única prueba que les quedaba para reconocer que eran los mismos jóvenes de los antifaces. Porque ellas les recordaban la noche en la que se enamoraron y juraron nunca olvidarse.

Y por muchas otras cosas.

Sin embargo, los meses pasaron y Nick no hizo ningún comentario al respecto.

<<Yo se la mandé por correo pero nunca supe si de veras la recibió>> te dijiste a ti misma y reconociste que, en aquellos días, lo que menos te preocupaba era si la recibía o no, porque lo que necesitabas era deshacerte de ella y ya.

Entonces te entró un pánico inexplicable ¿Y si él nunca la había recibido? ¿Dónde habría quedado aquel vestigio de su amor?. El terror aumentó más cuando reparaste en que Nicholas usaba su cadena de la diabetes, pero nunca lo hubiste vuelto a ver con su cadena que rezaba «Amor» grabado en el dije. ¿Y si se deshizo de ella, igual que tú lo hiciste? ¿Y si la recibió y las tiró a ambas a la basura?

No ibas a reprochárselo, porque entonces ustedes no eran nada y pasaron semanas sin hablar. Tú comenzaste tu historia con Jerry y él con Miley… Pero te parecía horrible pensar en el hecho de que algo tan importante hubiese desaparecido para ambos así sin más. Especialmente ahora que parecían recuperarlo todo. Sus cadenas eran la única pieza del rompecabezas que faltaba.

Entonces decidiste que era tu deber preguntárselo, independientemente de la respuesta que te diese. Por múltiples razones.

Y pasadas las nueve, cuando lo hiciste, Nick se puso pálido. Abrió los ojos, sorprendido, y parpadeó, perplejo.

Nick: Las cadenas… [murmuró con la vista fija en su vaso de refresco]

Tardó unos segundos en decir algo más, segundos que te parecieron eternos. Estuviste a punto de decir algo para cambiar de tema, no sin un poco de tristeza, pues el silencio habló por sí sólo y te echó en cara la respuesta. No obstante, Nick tomó la palabra.

Nick: Ahí están, ________.

Tu: [pasmada] ¿dónde?

Nick: Si no me equivoco, en California. [levantando la mirada, con una expresión demasiado adusta para tu gusto]

Tu: Oh… ¿Las dos? [susurraste, temerosa]

Nick: [asintió, reflexivo] Las dos.

Hubo un pesaroso silencio que los abrumó en medio del bullicio del resto de los comensales. De pronto se sintieron en el sitio y momento equivocado como para hablar del tema.

Tu: He querido saberlo, solamente. [rompiste el silencio] No quiero que pienses…

Nick: Ya que tocaste el tema, _______ [te interrumpió con una voz menos fría, pero igual de seria, y con curiosidad], no sé… Todavía recuerdo cuando la recibí en una cajita color negro con un listón dorado. Fue deprimente.

 Tu: [tragaste saliba] Por un momento pensé que se había perdido en el correo o algo… ¿En serio era negra? Qué funerario.

Nick: [esbozando una media sonrisa] Sí, era negra.

Tu: Vaya [desviaste tu mirada, turbada]

Nick: ¿En qué pensabas, entonces?

Tu: ¿Yo? [nerviosa] No sé. Pensaba… [recordando] Pensaba que era lo mejor. No quería llevar recuerdos atados al pecho, literalmente, y me dije a mí misma que la cadena te pertenecía a ti antes de que todo comenzara, y como lo nuestro había terminado, me convencí de que volvía a ser tuyo…

Nick: [ladeando un poquito su cabeza]

Tu: En realidad no fue difícil decidirlo. [con cierta amargura] Pero… Sabía que estaba entregando un pedacito de mí. [le miraste] Un pedacito de ti.

Nick: ¿Un pedacito de ambos?

Tu: [asentiste, nostálgica]

Nick: [frunció los labios, asintiendo también]

Tu: ¿Tú qué pensaste?

Nick: ¿Cuando la recibí? [afirmaste] Bueno… Qué lástima, pensé.

Tu: ¿Lástima?

Nick: Sí. Lástima e incredulidad. No podía creer que habíamos llegado hasta ese punto después de todo lo que habíamos pasado juntos [confesó, sintiendo los recuerdos latentes]. Pero no sentí nada… Ya lo tenía superado.

Tu: Oh…

Nick: Y pensé en que algo tan importante no debería perderse jamás. Por eso las guardé a las dos.

Un nuevo silencio invadió el ambiente. Un silencio lleno de pensamientos y reflexiones.

Tu: No sabría decirte si yo en tu lugar hubiera hecho lo mismo. [murmuraste]

Nick: ¿Por qué?

Tu: Porque no querría aferrarme a nada.

Nick: Pero no te desharías de ellas ¿o sí?

Tu: Supongo que las hubiese ocultado en alguna parte. [concluiste después de pensarlo un poco] No me atrevería… por mucho que me arrepintiera de algo.

Nick: Yo nunca me arrepentí.

Tu: Ni yo.

Cruzaron una mirada significativa.

Nick: ¿Tú… Tú la quieres de vuelta?

Tu: [bajaste la mirada] Ayer que hablábamos del día en que nos conocimos y de cuando nos reconocimos… Me acordé. Básicamente no pude dormir pensando en el tema.

Nick: ¿Si te la doy… la conservarás por siempre?

El corazón empezó a palpitarte sin control. La simple idea de tener aquel colgante en tus manos otra vez te traía enormes recuerdos y emociones.

Tu: Me hace ilusión. No sé si me explico… [expresaste con sinceridad]

Nick: A mí me gustaría regresártela, y no exactamente porque volvamos a tener algo entre nosotros.

Tu: [mirándole, dubitativa]

Nick: Que yo recuerde… Esa cadena, o mejor dicho, el dije, te lo obsequié porque quería que tuviésemos algo con lo cual recordarnos. Quería que no me olvidaras. [dirigiéndote una mirada intensa] Necesitaba saber que me recordarías por siempre.

Tu: [emocionada, con un nudo en la garganta]

Nick: Entonces te la di y tú… [sensiblero] Tú me prometiste que el dije siempre haría conjunto con la cadena que aquél día traías puesta… [parpadeó múltiples veces] Prometiste portarla por siempre…

El rostro de Nick se llenó de rubor y sus ojos mostraron un profundo recuerdo lleno de emoción. Estaban titilantes y húmedos. Nublados… No, eran tus ojos lo que se nublaron, los que se habían anegado en lágrimas que resbalaban lentamente por tus mejillas. Las palabras de Nick hicieron estallar tu corazón y ahora llorabas… Y Nick trataba de impedir el llanto, parpadeando una y otra vez, sin dejar de mirarte. Pero al final, no había mucho que hacer, porque su corazón también hubo convulsionado.

Ojalá el lugar no hubiese estado repleto de gente. Ojalá la mesa se hubiese vaporizado de repente para poderse abrazar…

El chico alargó el brazo para tomar tu mano. Recibiste su gesto con afectividad, arropando su mano entre las tuyas, estrechándola con ternura. Le dedicaste una sonrisa.

Tu: No sé cómo decírtelo Nick… [inspiraste profundo] Lamento haber roto esa promesa. Probablemente fue la primera entre nosotros… Y yo la rompí. [apenada] Sin embargo… [con la voz clara y segura] Si me permites tenerla, una vez más, te prometo que no volverá a suceder. Nunca debí quitármela… La tendré conmigo por siempre y para siempre, no importa lo que pase.

Nick: Nada me hace más ilusión a mí, _________. [aseguró en un hilo de voz]. Es tuya. En cuanto pueda, te la daré.

Tu: Gracias, Nick. Prometo cuidarla como a mi propio corazón.

Nick: [sonrió] Me basta con que vuelva a su poseedora eterna.

Nick depositó un suave beso sobre tu mano y la acarició como a un tesoro. Percibiste como el tiempo se había congelado en el instante y supiste que la cita estaba terminando. Suspiraste, aliviada. Entre más pronto se levantaran de sus asientos y salieran de aquel restaurante, mejor. Necesitabas estar a solas con él y él necesitaba estar a solas contigo.

No podías creerte, ni por un minuto, que tantas cosas estuviesen ocurriendo de pronto entre ustedes. Todo lo que nunca hubieron experimentado desde que se conocieron, lo estaban explorando con ímpetu en aquel lapso. Aquel lado que nunca tocaron de su relación, salía a flote con facilidad. Eran tantas cosas. Tantos sentimientos. Tantas memorias.

Y una inquietud volvió a posarse dentro de tu pecho. Volviste a preguntarte, no sin cierto remordimiento, si algo no andaba mal en todo aquello…

Una de las noches posteriores, la luna se alzaba menguante en la cima del cielo. Estaba demasiado brillante. Blanca y brillante sobre la hermosa Canadá.

Nick acababa de componer una canción con una de sus viejas guitarras. Era una canción triste, de amor. Él no tenía un título lo bastante apropiado para ella, pero podría haberle puesto tu nombre, porque cada nota y verso gritaba ________ entre líneas. La escribió con el alma desgarrada y el corazón desangrando. Era muy duro; necesitaba desahogarse. Escribió sobre un sentimiento profundo que era capaz de cambiar el mundo. Habló de la luz de unos bellos ojos, y de como una sonrisa iluminaba el más oscuro abismo. Pero también agregaba una historia difícil, casi trágica pero hermosa, y como el final del camino se abría en dos vertientes y los dos estaban forzados a separarse, o al menos, con el fin de garantizar la libertad y felicidad del otro. Una vida para ella, la muchacha cuyo corazón de oro, puro y fuerte, ansiaba explorar horizontes que a la larga, él no sabría acompañar.

Quizás… en un futuro, el destino de verdad los querría juntos. Tal vez, en algunos años, las circunstancias cambiarían y sus vidas harían ver al amor un poco más fácil de como nunca lo fue.

Pero Nicholas no quería aferrarse a esa esperanza, a una quimera. No podía. Con cada minuto que pasaba, no podía evitar sentir un último capítulo acabar. No importaba cuán cerca estuvieses de él, cada vez te sentía más lejos…. e inalcanzable.

Él ya había decidido dejarte ir.

En tu cabaña, un pensamiento semejante surcaba tu mente una y otra vez. No había manera de eludir el presentimiento de que, entre más próxima estabas a Nick, más evidente era el hecho de que él no estaba allí. Nick estaba lejos, cada vez más lejos… en un lugar donde, sospechabas, no podrías alcanzarle. Y temías. Temías por él, por ti, y por lo que ambos tenían.

Tus hombros se convulsionaron, silenciosos, en intranquilos sollozos. A lo mejor era porque te encontrabas muy sentimental, con el período encima y las emociones a brote. Quizás era porque hacía ya días que no llorabas por varias cosas… Por alegría, por emoción, por añoranza, llorar por tristeza, llorar por miedo, llorar por amor… O, simple y sencillamente, llorar por llorar. Sin más.

Sin embargo, la gota que colmó al vaso tenía nombre, y era Nick. Nicholas, tu novio. Nicholas, tu amado. Nicholas, tu sueño.

Luego de haber tenido su cita en aquél elegante restorán, hubo algo que se avivó en los ojos de él. Se trataba de ese extraño brillo en su mirada, pesaroso y melancólico que notaste desde que volviste del repentino viaje a Europa.

Si contabas las horas a su lado, los dedos de las manos se te acababan. Nick continuó mimándote y demostrándote su intenso cariño de mil y un maneras. Seguía haciendo lo imposible para pasar cada ratito libre suyo a tu lado, regalándote preciosos instantes, enamorándote… Y angustiándote. Sus largas miradas terminaban por afligirte debido a tanta emoción contenida en ellas; emoción cautivadora y trágica, a la vez. En algunas otras ocasiones, el chico no podía sostenerte la vista por mucho tiempo. Y tú, por miedo a descubrir algo que no te gustara, tampoco tardabas mucho en apartarla de él.

Obligada a verle el lado positivo a las cosas, jamás permitiste que esas preocupaciones se reflejasen en tu comportamiento frente a él. No obstante, Nicholas dejaba caer los hombros de vez en cuando, en cuanto creía pasar desapercibido, sumido en lejanos pensamientos. Suspiraba. Te acariciaba y te tocaba con roces que expresaban un fuerte deseo de que no te fueras nunca. Te estremecías. Algo andaba mal. Pero todo era tan mágico y maravilloso. El amor parecía lo más fácil del mundo… Y te dejabas llevar.

Humedeciste la almohada un rato más. El cansancio te venció, al fin y al cabo, pero la incertidumbre se coló hasta el último rincón de tu cuerpo, incluidos tus sueños.

Mientras dormías, un montón de cosas surgieron de tu subconsciencia. Entre ellas, un sueño bonito y triste. Nick aparecía en él, en un lugar de pisos, paredes y techos blancos como la tiza. Estaban despidiéndose. Sabías que  regresaría, siempre regresaba, y tú lo esperarías. Él volvió, mucho tiempo después, mas no tardó en marcharse nuevamente. Así sucedió un par de veces más, hasta que te diste cuenta de que detrás tuyo había un espejo que reflejaba a una menuda anciana… Y Nicholas volvió, y pelearon. Volviste a ser joven, y le golpeaste el pecho, pero el esquivaba cada golpe tuyo… y terminaba besándote. Tú caías sucumbida a sus pies. Él cuidó de ti por mucho tiempo, tanto que pareció una eternidad, pero al final él te habló en un idioma que no lograste comprender. Sin embargo, el mensaje era claro: él necesitaba irse, y tú no ibas a impedírselo. Pero unas cadenas aparecieron y te clavaron en tu mismo puesto, mientras lo veías partir… No, ahora las cadenas eran las de Nick, atadas a ti. Luego cambiaron, eras tú la encadenada a él. Y de pronto hubo muchas cadenas, demasiadas, tantas que te aplastaban bajo su peso. Gritaste el nombre de Nicholas, pero él se encontraba muy lejos, prometiéndote amor, estabilidad, felicidad, independencia… Prometiendo volver. Las cadenas desaparecieron dejando tras de sí muchos rostros conocidos: tu papá, tu mamá, tus amigas y amigos… Y sonreíste, con lágrimas en los ojos. 

Un minuto después, Nicholas se presentó con una docena de rosas, de chocolates, de peluches, de obsequios… En un cuarto vacío, que se hacía cada vez más pequeño… El enorme deseo de tirarte a él y entregarle todo de ti se desató de la nada y pronto, los dos rodaban sobre el piso, sobre la hierba, en una piscina, en el aire… Era tan surreal. Tan todo.

Y volviste a fijarte en él. Nick estaba llorando. Decía que tenía que irse, otra vez. No estabas segura de cuántas veces había dicho aquello hasta entonces, pero supiste que no podrías soportar ninguna otra ocasión más. Le suplicaste que se quedara, y se quedó… Pero un día, te despertaste en los brazos de nada, de nadie. Te sentiste vacía, incompleta, y descubriste en el fondo de tu ser que él no se había ido a ninguna parte. Tú fuiste la que eligió despertar de un sueño. Del sueño de un sueño.

De muchos sueños. Y el mundo se apagó.

Abriste los ojos, mareada. No recordaste nada, a excepción de que Nick era todo un caso de amor.

Amor… Casi habían hecho el amor. Sentiste un nudo en la garganta. Como una tina de agua fría, la realidad golpeó a tu corazón e intuiste, casi tan mecánicamente como uno diría que dos más dos son cuatro, que Nick Jonas estaba apunto de romper contigo.

Tu corazón palpitó ahogado en llanto. Era horrible. Quisiste salir y gritar, deseaste romper las mantas que te cubrían, querías tirar, destrozar y golpear todo lo que se te atravesara en el camino. Y también, quisiste imaginar su cara diciéndote que era mentira, que a él jamás se le había pasado por la cabeza semejante idea.

Pero sabías que ni en tu imaginación podrías convencerte de lo contrario. Por eso, te sentiste una estúpida; colérica y desilusionada. Las cosas lucían tan claras desde aquella perspectiva que dolía, dolía mucho. Dolía pensar que la persona a quien más amabas, y quien te amaba tanto, planeara ponerle fin a todo. Pero ¿y si no te amaba? ¿y si sólo jugó contigo? ¿y si se trataba de una paranoia?

Entrecerraste los ojos, apretando los dientes. Antes de cumplir dieciséis años hubiste roto con Nicholas porque se decepcionaron de la confianza que se tenían el uno al otro. Agonizaste por días. Meses después, el muchacho decidió confesarte que ya no sabía lo que sentía por ti. Lo aceptaste y te deprimiste, deseándoles un final feliz. Más tarde, Nick volvió tras tus pasos hablándote del amor, palabras que te dieron alas. Las alas se te rompieron, se desmoronaron y ardieron con tu última esperanza. Ahora, ambos encontraron las cenizas de su historia y acordaron en continuarla de una manera que nunca soñaron, una manera demasiado insuperable como para ser cierta.

Y por algún motivo que se te escapaba, aquello había tenido fecha de caducidad desde un principio. Los días hubieron estado marcados, en un increíble lapso de tiempo, para manifestar su fin en un ingenioso colapso.

No era un plan maléfico. Tampoco era una casualidad. Tenías la certeza de que tú colaboraste en el rompecabezas tanto como Nick lo hubo hecho, y ambos disfrutaron de aquellos días sin o con la consciencia de que se desvanecerían como un último aliento. Porque tú no querías acompañarlo en su tour. Porque él, de alguna manera, ya no te contemplaba con él; por eso no se tomó la molestia de preguntarte siquiera si contaba con tu presencia en su segunda parte de la gira. Y a ti te hacía más ilusión volver a casa que estar a su lado.

Y el corazón se te agrietó.

<<No, Nicholas. No me lo vas a volver a hacer>> juraste para ti misma.

El día anterior, Marilu había decidido hablar contigo sobre el tema. No te abrió los ojos en nada, sólo en el hecho de que tú no eras la única con la creencia de que algo no iba bien.

Marilu: No quería alarmarte, _________. Pero es lo que pienso… Lo que pensamos, en realidad.

Tu: ¿Tú y quién más? [meditabunda]

Marilu: Joe, Kevin y Analy.

Tu: ¿Analy…? ¿Los chicos? No puede ser [desconcertada]. ¿Qué saben ellos? ¿Nick les dijo algo?

Marilu: No. Nick no habla del tema. [negó] Según ellos, lo evade olímpicamente.

Tu: [frunciste el ceño] Yo ya lo sospechaba.

Marilu: ¿De…de veras? [sorprendida] Pensábamos…

Tu: No se me iba a escapar el detalle, Marilu. Lo conozco demasiado bien. [amargamente]

Marilu: Es una pena… Realmente no sé que le pasa a él por la cabeza. Tarado. [gruñó]

Tu: Tarado o no, yo no quise averiguar más cosas… Lo hablé con Dakota, la noche en la que acampamos afuera. Ella me convenció de que nada ocurría, de que a su parecer Nick no hacía más que actuar como el mejor novio del mundo.

Marilu: Ah. Ya entiendo.

Tu: Pero de verdad estaba preocupada. Y ahora lo estoy aún más [con un nudo en la garganta]. Él ha actuado raro… Pero todo lo que me dijo Dakota con respecto a que Nick me ama con sinceridad no se me olvida, y sé que tiene razón. Todo es muy confuso.

Marilu: Dakota te dijo la verdad, no lo dudes [apretándote el brazo, como consuelo]. Cualquiera pensaría lo mismo que ella. Pero los chicos y nosotras, no somos cualquiera: somos tus amigos. Sus amigos [enfatizó]. Y los vimos desde que comenzaron a salir y también vimos sus tropiezos. Por eso pensamos que hay algo diferente, algo que no se veía cuando estábamos en Cali…

Tu: Lo sé. [murmuraste]

Marilu: ¡Demonios! [estalló] Es que él te promete todo… Pero no ha hablado de lo que pasará cuando el campamento acabe ¿verdad? Te juro, ________, te juro que si al final se atreve a hacerte sufrir, le desfiguro su galante cabezota. [enfadada] No puedo creer que se ciegue a sí mismo, ¿qué le pasa al estúpido? ¡Idiota! ¡Todos los hombres son iguales! ¡Ugh!

Tu: [la miraste] ¿Todos?

Marilu: Bueno… No todos.

Tu: La culpa es la nuestra por enamorarnos de tontos. [mascullaste] Conozco a Nick, Marilu… [hundiendo el rostro entre las manos, dolida] y Kevin y Joe también, por algo son sus hermanos. Ninguno de nosotros ha sabido interpretar lo que le pasa. No comprendo nada. No sé a qué atenerme. No sé qué pensar.

Marilu: A Anny y a mí nos gustaría que vieras por ti, por primera vez. Ya sabemos que te encanta poner a otras cosas de frente.

Tu: ¿Y qué hago? ¿Hablar con él? Yo no… No quiero terminar con él.

Marilu: Lo sé. Y tampoco digo que él quiera terminar contigo, pero, te debe una larga explicación ¿no?

Tu: [después de un minuto callada] Ya me imagino lo que me dirá.

Marilu: Oye, ______. Debes pensar en lo que pasará mañana. En el futuro. ¿Crees entonces que vale la pena?

Tu: [devolviéndole la mirada] No tengo la menor idea. Pero, sí sé cómo se siente que él rompa conmigo. No me lo voy a permitir.

<<No voy a permitirme caer. No tropezaré otra vez con la misma piedra. No estoy para jugar a la llorona. Si él quiere, yo también>> asumiste, decidida.

Y más tarde, después de despejarte y aseverarlo todo, te plantaste frente a la cabaña vecina al puente del lago, con los brazos cruzados. Poniendo un poco de atención, las notas musicales del piano podían distinguirse en su interior. Cualquiera se preguntaría quién tocaba tan bien y qué canción era esa. La canción era familiar, y para ti estaba claro que se trataba de Nicholas.

En lo más profundo de tu pecho, tu entraña latía agitada. Hubiste respirado una, dos, tres veces… preparándote para todo. Habías construido una muralla alrededor de tus sentimientos. Tenías miedo y estabas entristecida, pesarosa. Pero también estabas lista, determinante y fría. Muy en tu interior, deseabas seguir escuchando aquella melodía, sólo para evitar que el momento de afrontarlo llegara…

Mas, una vez que diste un paso al frente, ya no pudiste parar. Llegaste a la entrada y empujaste la puerta.

Nick se volvió enseguida cogido por sorpresa, y sonrió.

Nick: Hola [saludó de buen humor]

El corazón se te cayó a los pies.

Tu: Hola, Nick [le devolviste la sonrisa] ¿Qué haces?

Nick: Tocar [señalando al piano con una cabezada]

Tu: Me lo suponía [acercándote a él] ¿Es una canción nueva?

Nick: No. Es One Day At a Time.

Tu: ¿One…? Oh. Qué bonito.

Nick: ¿Quieres escuchar?

Vacilaste.

Tu: Me gustaría… [con infinito esfuerzo] pero antes tengo que hablarte de otra cosa.

Nick: Claro [se encogió de hombros], dime.

Te mordiste la lengua. No sabías cómo comenzar. Ensayaste el discurso antes de llegar y ahora estabas en blanco. Así que, tumbaste tus barreras, y dejaste que el corazón hablara por sí mismo…

Nick dejó que le tomaras la barbilla y que le alzaras su mirada. Sus ojos se encontraron con los tuyos. Frunció el ceño, pero no le dejaste hablar.

Tu: Nick [murmuraste, sin apartar la vista] ¿Por qué veo tantas cosas en tus ojos… y todas me preocupan?

Nick: [abriendo la boca para decir algo]

Tu: [negaste con la cabeza] No sé dónde estás, ni tampoco qué pretendes. Pero, por favor, dímelo.

Nick: ¿Qué quieres que te diga? [desorientado]

Suspiraste.

Tu: Explícame por qué vas a romper conmigo.

El corazón de Nick dio un vuelco. Desvió la mirada.

Tu: [alejando tu mano de su rostro] Ya, anda. No sirve de nada que…

Nick: ¿Desde hace cuánto? [cortó]

Tu: ¿Desde hace cuánto… qué?

Nick: ¿Hace cuánto que sabes eso?

Tu: [tragaste saliba] Sospechaba algo…

Nick: [te miró] No quería que fuera tan pronto. Lo lamento.

Tu: ¿Qué?

Nick: ________…

Pero ya habías perdido toda serenidad.

Tu: ¿Pronto? ¡Pronto! [estallaste] ¿En qué pensabas, Nicholas? ¡El próximo martes se acaban las grabaciones! ¿Qué querías? ¿Esperar al último minuto y decirme que me amas pero que tenemos que romper? ¡Dime!

Nick: Esperaba poder darnos el máximo de tiempo posible… [con voz ahogada]

Tu: ¿Por qué?

Nick: ¿Por qué más, __________? [alzando la voz] ¿Crees que fue fácil para mí tomar la decisión?

Tu: Fácil o no, Nick, lo vas a hacer. ¿Y sabes qué? No entiendo. ¡No te entiendo! ¿Qué has pretendido todas estas semanas? ¿Por qué te has empeñado tanto en dármelo todo para arrebatármelo ahora?

Nick: ¡No voy a arrebatarte nada! ¡No he querido hacerte daño..!

Tu: ¡Claro que no! ¡Tú nunca quieres hacerme daño! ¡Nunca! [gritaste]

Sus ojos se anegaron en lágrimas. Sus gargantas estaban ensanchadas. Sus respiraciones, entrecortadas.

Tu: ¿Puedes… decirme… a qué has estado jugando? [lentamente]

Nick: No he jugado a nada.

Tu: Entonces, explícame, ¿por qué volviste a pedirme que fuéramos novios para después dejarme?

Nick: Yo no… Es lo más correcto, _______. Entiéndelo.

Tu: Nunca voy a entenderlo Nick [entornaste la mirada, dolida] ¿Por qué no lo entiendes tú?

Nick: ¿El qué?

Tu: El que te amo. [lagrimando] Y yo no quiero marcharme.

Nick: Pero tienes que… [murmuró]

Tu: ¿Por qué?

Nick: Porque ¿qué puedo darte yo…?

Tu: ¡Maldita sea, Nicholas!

Nick: No quiero arrebatarte nada [interrumpió, firmemente]. Esa es la razón.  ¿Crees que no soy consciente de cuántas oportunidades has dejado por estar junto a mí? ¿Crees que no sé cuánto sufres porque hay muchas cosas que dejas a un lado? ¿Tienes la más remota  idea de cuán culpable me siento por ello? [exclamó, víctima de la desesperación] ¡Dejas tu vida a un lado! ¡Extrañas a demasiada gente! ¡Quieres estar en casa! ¿Y yo qué hago? Encadenarte a mí, teniéndote de un lado para otro… No es mi intención tenerte subyugada. ¡Quiero que seas feliz!

Tu: ¿Y de dónde has sacado la idea de que yo no he renunciado voluntariamente a todo eso? [refutaste, enfurecida]

Nick: ¡Dakota¡ ¡Marilu! ¡Analy! ¡Joe! ¡Kevin! ¡Mis padres! ¡Tus padres! ¡Mis amigos! ¡EL MUNDO! ¡TÚ MISMA! ¿Es tan difícil aceptarlo? Ambos sabemos que lo que sacrificas es un precio demasiado alto, no lo valgo… Aunque pienses lo contrario. [insistió, reprimiendo sollozos]

Tu:  ¿Y por qué tan seguro?

Nick: ¡Pues porque no hay nadie que me consuele! [pronunció herido] Porque no es sólo eso… [en un hilo de voz] No soporto tenerte atada a mí. No soporto la distancia. No puedo… Amarte, y saber, que hacerlo es demasiado complicado. Y que sufrimos. [sacudió la cabeza] No mereces estar con alguien que no pueda tirar de la misma cuerda contigo, porque yo aflojo demasiado…

Tu: [estupefacta] ¿Estuviste espiándonos?

Nick: [sin responder]

Tu: ¿Es por eso? ¿Por las cosas que dije? ¿Por eso…?

Nick: Escuché todo lo que tenías por decir, ______. Y lo dijiste todo. Le dijiste a Dakota todo lo que nunca me has podido decir a mí.

Tu: Nick…

Nick: Debiste de habérmelo dicho desde hace mucho. Eso sólo me hizo ver que realmente necesitaba tomar la decisión…

Tu: ¡Eres un egoísta! [chillaste] ¿Y qué hay de mí?

Nick: ¿Qué hay de ti? ¿No me has estado escuchado?

Tu: Escucho mentiras. [replicaste, impaciente] Escucho la mitad de la verdad. Pero no escucho a tu corazón.

Nick: ¿Quieres saber lo que siente mi corazón ahora?

Nicholas alargó su brazo y te tomó por la muñeca, acercándose peligrosamente hacia ti. Observaste sus ojos enrojecidos y su expresión de impotencia. Su respiración estaba tremendamente cerca, y sus labios… Te obligaron a dar un paso hacia atrás y a soltarte de él, con brusquedad.

Tu: No me hagas esto.

Nick: Eso es lo que quiero, ______… Besarte. Pero no puedo. Estoy resignado ¿sabes? Lo mejor que podrías hacer es alejarte de mí, del dolor. Puedes irte con Travis, él te recibirá con todo el amor que no podré darte jamás. Él es el chico perfecto, lo dijiste.

Tu: No. ¡Olvídate de eso! [espetaste] Eres un cobarde. Mira, Nick… ¡Mírate! Después de todo lo que hemos pasado… [sollozaste, rendida] Después de Selena, de Miley, de los medios, de todo… [te estremeciste] ¿Cómo has podido…? ¡Después de las noches, de los juegos, de los sueños! ¿Qué pasa con los besos, con los abrazos, con las risas, con las charlas…! Yo… Yo no puedo creer que hayamos llegado tan lejos… Estaba dispuesta a ser tuya, ________. ¡En el hotel, en tu cama! ¿Dónde quedó el Nicholas de quién me enamoré por primera vez? ¿Dónde está el príncipe que juraba que a mayor distancia más grande era nuestro amor…? ¿Puedes decírmelo? ¿Puedes?

Nicholas no podía más.

Nick: Está aquí… Soy yo.

Tu: No. No eres tú…

Nick: [suspiró] ¿Me perdonarás, _______?

Tu: ¿Perdonarte? ¿Cuántas veces más, Nick?

Nick: [negó de un lado a otro]

Tu: Estás cometiendo un error, Nick… [murmuraste, desolada] Por favor, dime que podemos resolverlo…

Nick: [cabizbajo] No quiero que vuelvas a perdonarme. 

Endureciste tus facciones y respiraste hondo. Un profundo corte surcó tu pecho.

Tu: Bien. [replicaste] Entonces sólo me queda decirte que te voy a dar el gusto… No voy a sufrir por ti. Jamás.

Nick: [te miró]

Tu: Pero si vuelves…

Nick: [con los labios temblando]

Tu: … No olvides tus promesas.

Nick: ¿Qué…?

Tu: [mordiéndote el labio] Creo que te prometiste a ti mismo ser el hombre más estúpido del mundo. A ver quién te lo quita.

Nick: _______…

Tu: Aunque últimamente es difícil que mantengas tus promesas en pie ¿no? [con los brazos cruzados] O quizás eso sea sólo conmigo. No lo sé. Ya no importa.

Nick: Lo… lo siento mucho.

Tu: No. Yo lo siento. [viéndolo fijamente] No sabes cuánto.

Nick quiso abrazarte, por última vez…

Pero tú ya habías girado sobre tus talones, en dirección a la puerta. Él se quedó observando cómo te alejabas, con el corazón hecho pedazos. Deseó poder gritar que te amaba y que siempre lo haría… Que una parte de su alma te la llevabas tú.

Las palabras no salieron. En cambio, las tuyas se escucharon como un eco, rotundo, frío e inexpresivo en aquél cuarto lleno de tensión y pesar.

Tu: Quisiera que me contestaras una última cosa [ladeaste tu cabeza, mirándolo] ¿Cuando me llamaste por teléfono desde Nueva York hace meses, tenías intenciones de romper conmigo, o sólo querías decirme que estabas confundido?

Nick: [aturdido] ¿Cómo dices…?

Tu: Nueva York. Miley.

Nick: Ah… Yo… [haciendo un esfuerzo para que le saliera la voz] Sólo quería quedar en buenos términos contigo.

Tu: [asentiste, meditando] ¿Alguna vez te has puesto ebrio, Nick?

Nick: [negó, confuso]

Tu: Qué bueno. Nunca lo hagas. [tomando el pomo de la puerta] Mucho menos por amor. Mucho menos si está destinado a terminar así.

Nick: Yo…

Tu: Adiós, Nick. Gracias por todo.

Cerraste la puerta tras de ti. No sólo la puerta… Lo cerraste todo. Todo.

Nicholas golpeó la pared, desconsolado. Pateó y dio puñetazos una y otra vez, como si el dolor físico sustituyera o calmara el dolor que le causaba tu partida. Su decisión. Su maldita decisión.

<<Debería correr tras ella. Debería perseguirla hasta el fin del mundo>> pensó, pero, en un recodo de su alma sabía perfectamente que nunca sería tan imposible recuperarte como entonces. Y sabía, también, que quizás te había perdido para siempre. Y que tenías razón: acababa de cometer el peor error de su vida.

Tú pudiste haber corrido, gritado… Pero te sentiste vacía, extraña. Sentiste que de pronto ya nada valía la pena. Te sentiste sola y, sin embargo, estabas feliz.

<<Como que me siento libre>> opinaste, mientras caminabas hacia ningún lugar en especial. <<Me siento diferente. Me siento… con calma>>

Triste estabas, sin duda. Pero ¿qué ibas a hacer? ¿deprimirte? ¿sufrir?. Terminarías por llorar otra vez, en algún momento, con toda seguridad… Mas te agradaba la idea de poder respirar un aire nuevo, de poder haber recuperado el oxígeno del que se te había privado, por todos esos sofocantes días… Salpicados de ternura, pero, al fin y al cabo, agobiantes.

<<Gracias al cielo, he estado preparándome para esto. Para ser fuerte.>>

Y pensaste que el Nick que habías conocido, aquél a quien amabas tanto, estaría orgulloso de ti.

No ese desentendido con el que acababas de terminar. Ese tipejo, ese malgastado lado de la moneda, ese egoísta… Que te impediría desenamorarte. Porque a él también lo amabas.

Pestañeaste, resistiéndote a las lágrimas. <<Gracias por enseñarme lo que es el verdadero amor, Nicholas. Ya es hora de seguir adelante>>.

Pero Nick jamás se enteraría de aquellas sabias palabras. Por el contrario, estaría volviéndose loco por ti. Loco por saber, no que no podía tenerte, sino que no podría recuperarte. Y no supo cómo hacer para sobreponerse hasta el último día de filmación

¿Este es el final..?

Cualquier otra pregunta queda fuera de plano. O_O Recuerdo cómo han sido todas y cada una de las peleas entre __(tú)______ y Nick, porque les juro que hasta yo sufrí con cada una de ellas, con una expresión de dolor en el rostro mientras escribía, pero ésta ha sido algo distinta… Trato de hacerles ver que (tú)__________ ha madurado. Espero que lo hayan notado xD

Y Nick sigue siendo un tonto, como siempre. También me he dado cuenta que le has perdonado muchas cosas ¿no? En la vida real sería complicadísimo sobreponerse a todo eso +_+ pero ya qué, es una cosa que sólo ustedes dos pueden resolver. (lol).

ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO! Lo he hecho con cariño <3 y muy alentada y motivada. Sería fantástico llegar al capítulo 40…. pero veremos qué puedo hacer al respecto. No creo extenderme tanto, así que predigo un final prontito c:

Y creo que ya tengo el final perfecto! :D

No tengo mucho que decir, sólo que gracias por sus comentarios (‘: Al menos sigo teniéndolas  a ustedes.
SALUDOS!..

14 comentarios

  1. leydi*

    O_O extiendete hasta el capitulo 50, por favoor! Jaja WOW! En verdad quedé sin palabras…y esa conversación fue tan O_O! En serio, no miento, lagrimas brotaron de mis ojos mientras la leía, lo sentí tan real! Cecy, muy bien hecho! Me ha encando el capitulo, ciertamente triste pero es genial, y sí se nota la madurez del personaje, me encanto, como quisiera que no terminara, pero todo los bueno tiene un final, Gracias por el cap! Saludos

    5 febrero, 2012 en 13:39

  2. Cecilia Chavez

    nooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo AMEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE el capitulo :DDD aunque hubiese querido que Nicholas dejara de sera tan bruto ¬¬ peroo bueeeno si la autora pudiese no seeee 8) hacer que derepente le entrara un ataque de madurez a Nick Uffa me haria feliz :DDD xDD

    5 febrero, 2012 en 23:15

  3. Giulli!

    Escribes extremadamente bien!! No se como lo haces!!
    No quiero que se termine, es una historia de amor muy hermosaaa!!
    Cuando acabe la nove, vas a escribir otra?? me gustaría saber esoooo, así que espero tu respuesta ceciii!!!

    Ya quiero leer otro, te juro que no puedo imaginar un final con todo lo que ha pasadoo!

    Bueno besos!! :)

    6 febrero, 2012 en 2:16

  4. omg! me encanto fasinante aun sigo llorando y tienes razon ya le a perdonado mucho y en la vida real eso no pasa ……ya kiero saber k es lo k va a pasar en el siguiente cap y al mismo tiempo estas triste saber k ya se acerca el fin… yo se k el fin va a doler (sea como sea k acabe) pok ya me e acostumbrado a leer tu nove k cuando deje de acerlo me ara mucha falta sentire k algo me falta…..y siguela estoy tan (siento de todo ahora emocion tizteza por el rompimiento y al mismo tiempo felis pok ella a madurado ) eres una gran escrito sigue asiendolo asi como lo vienes asiengo =]

    6 febrero, 2012 en 4:03

  5. Kenia

    Ohh Cecy estoy sin palabras,lo juro.Es que este fue un capitulo muy diferente , muy delicado pero a la vez fuerte no se , la conversacion fue tan tan emocionante , _______ ha madurado mucho (: y bueno Nicholas sigue siendo tonto es q no se porq queria terminar :| si ella lo ama y esq este es un brocoli andante jaja pero bueno tu tienes la desicion final y sea cual sea se q sera un hermoso final , lastima q se termina pero se q esta novela me hara falta y mucha y es q de todas las q leo es mi principal , tienes una forma de escribir espectacular, te juro q he llorado (no sabes cuantas veces he llorado con los demas capitulos).En fin no se espero que al final Nicho recapacite y que ________ lo acepte (: pero q va cual quier final sera bueno.Por si las dudas , osea q Nick termino con _________ porque el piensa que no es bueno q ella este dejando muchas cosas por el ? El piensa que no la merece? :| en fin tendre q volverlo a leer y esque es de madruga ( la tentacion me gano).Gracias por subir capitulo , ya dije que me encanto? :D

    6 febrero, 2012 en 8:05

    • :D Has entendido bien! Nick ama a _______ con todo su corazón, pero el bruto [lol] está convencido, y no sin razón, de que ella ha dejado muchas cosas por estar con él, de que su relación sea como sea siempre está fuera de lo normal y piensa, aunque tú no lo comprendas, que serás más feliz si empiezas a disfrutar tu propia vida. Una vida en la que no estés atada a su persona, y en la que no sufras debido a todo ello. En cuanto a si él piensa que no te merece… No piensa en eso. Sabe que eres perfecta, pero le preocupa más que encuentres la felicidad en alguien que pueda permitirte tener todo lo que según él te ha quitado. Tiene una excusa gigante, pero al final él mismo sabe que a parte de todo eso, le tiene miedo a la distancia. :3

      6 febrero, 2012 en 18:11

  6. Grizzly

    Oh! Morí Morí Morí Morí MOOOOOOOOOOOOOOOOORÍÍ
    Definitivamente este es mi favorito..se ve que hemos madurado
    Pero ojala Nicholas se de cuenta de lo que hace y tambien madure
    Por favor que haya mas capitulos …..y que la historia no acabe ahi
    entre______&Nicholas.

    Ademas quisiera decirte que fue la unica novela que
    me tuvo pegada a la PC por años, desde que buscando fotos en
    Google de Nick encontre tu primera pagina, y desde entonces cada
    ves que entraba lo revisaba(lo tenia en favoritos), aunque no comentaba mucho
    pero siempre estaba ahi leyendo.
    Hasta en las reuniones familiares agarraba la PC y me ponia a leer.
    Eso que a mi no me gustaba leer pero gracias a tus novelas me pareció genial. Definitivamente algo nuevo reir, llorar , sonreir, alegrarme, emocionarme, apenarme hasta sentir mariposas en el estomago y tantas mas emociones que solo pense que se podia sentir en la vida cotidiana, pues no pensaba que eso se podia sentir con solo leer unas cuantas palabras que significaban tanto.

    Por ultimo que espero que sigas escribiendo mas novelas que definitivamente las leere. porque eres excelente en haciendolo. Bueno cuidate y mucho.

    6 febrero, 2012 en 22:45

  7. siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    porfavor siguela pronto :D
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela
    siguela

    7 febrero, 2012 en 0:08

  8. Wow…me dejaste atónita.
    Hace tiempo que no lloraba con una capítulo, porque ultimamente vienen siendo felices, asi que me agarraste desprevenida. Tuve que ir dos veces al baño! jaja
    Tu eres la única que me hace llorar asi, enserio.
    De verdad, estoy muy confundida.
    Es decir, Entiendo perfectamente a _____ (el personaje) porque yo he madurado con ella. Creo que ya hace dos años y algo que leo tu novela y es la novela mas hermosa, fantástica y genial de todas.
    Hasta el final no tenia claro el porque de querer romper conmigo, pero lo entiendo.
    Y la verdad es que si, Nick sigue siendo un tonto.
    Pero un adorable y lindo tonto!
    Por favor, no digas que no sabes si va a llegar al capítulo 40 porque me deprimo ._.
    Por mi siguela toda la vida! jaja
    Es que no puedo creer que vaya a terminar :(
    Pero, bueno, antes de que me vaya de las ramas diciendote lo que te quiero decir cuando termines tu novela, me despido.
    Enserio me encantó el capítulo.
    Espero ansiosa los ultimos capítulos de mi novela favorita.
    Besos,
    Si tienes tiempo pasate por esta novela :D
    http://www.just-a-dream.metroblog.com

    Naahi

    8 febrero, 2012 en 5:10

  9. Simplemente amé este capitulo.
    Me encanta la intensidad de las palabras, no es como si estuvieras leyéndolo, te transporta hacia la escena, me encanta que la historia cada vez se vuelve más y mas realista, no solo con fantasías románticas como la mayoría de las novelas que he visto, me encanta el hecho de que se transmiten cada una de las emociones en el personaje.
    Mi parte favorita de este capitulo fue sin duda la pelea, esa pelea con la que cada pausa te hacía creer que tu estabas diciendo las palabras, que ni siquiera tenías que seguir leyendo porque te metías en la mente del personaje y sabías lo que estaba a punto de decir, no puedo explicar con palabras lo IMPRESIONADA que estoy de tu talento, de verdad espero que en un futuro sigas haciendo esto y deleitándonos con tu hermosa manera de escribir.
    Definitivamente esta novela es una de las novelas mejor elaboradas que he leído por todo el internet y fuera de él, a pesar de que no buscas un gran reconocimiento mundial haces esto por el amor al arte creo yo, porque amas hacer lo que haces.
    De verdad no se como agradecerte cada una de las emociones que me haces sentir cada que leo un nuevo capitulo.
    Sea como sea que esto vaya a acabar espero que hagas algo muy a parte de un artista como lo es Nick Jonas y que crees una novela con personajes fuera del mundo de la farándula, que nos des personajes totalmente nuevos, personajes que se basen en personas no famosas y que sea una nueva meta ya que un personaje famoso sabemos sus expresiones, sabemos un poco de como piensa, lo que puede o no puede hacer, sabemos demasiado de un personaje como estos y no llevamos nuestra imaginación más que a alguien ya predeterminado, me encantaría que hicieras a personajes totalmente nuevos para que seas tu la que les vaya dando vida, que nos transmitan como es que piensan y como es que actuan, imaginarnos sus gestos y todo lo que quieras que nos imaginemos.
    De verdad TE FELICITO por ser tan talentosa en este aspecto, espero y seas así en muchas otras cosas más.
    Gracias por hacer que me pasara un muy buen rato leyendo esta historia.

    Carolina.

    8 febrero, 2012 en 6:23

  10. encerio este capitulo fue masoquistaaaaaa….. me hizo recordar a cuando termine con mi novio y justo ahora estoy enojada con el entonce slo lei y fue como que: ok creo que tenemos los mismos problemas! -.- AMO la forma de escribir qu tienes y esa manera de hacernos sentir lo que pasa por la emnte y el corazon de los personajes. No aguanto por leer el final (:

    8 febrero, 2012 en 6:54

  11. Luisa

    Llore u.u… Me encanto. ¿Por que rayos Nick tiene que andar asumiendo cosas e_e? esta siendo demasiado egoista con la relacion, con los sentimientos de _________ Y sus propios sentimientos. Si esto fuese la vida real ya lo hubiese quemado con todo y cabaña xDD… Es la peor desicion -.- …. NICK TE QUEMO EL RANCHO!! (Expresion Venezolana cuando un hombre se porta mal o algo sale mal xD)… Bueno, me gusto demasiado. (Ojala Marilu lo golpee xD)

    8 febrero, 2012 en 17:53

  12. Fatu

    Fatu wants to cry… Dios mío… me dejas sin palabras… fue un buen comienzo… desenlace fatal… la verdad no me lo esperaba de esa manera… pero, quién sabe sea algo mejor después…=)

    10 febrero, 2012 en 20:31

  13. Esa desmostración de valor de parte de ______ me lleno de ánimos. Me hizo llorar de felicidad, pero de tristeza también porque sé que le dolía terminar con Nicholas. Lo cierto es que has hecho un gran trabajo con la trama de la novela porque desde un principio se notaba que en algún punto habría un momento emotico así que haría que todas llorasemos contigo y tuviesemos ese mismo rostro de dolor que tu tuviste al escribirlo.

    _________ ha madurado y Analy y Marilu estarán tan orgullosas de ella como ese Nicholas fuerte que en algún momento conoció.

    Espero con ansias que subas pronto y que todo esto se alargue hasta ese capítulo 40 ;) Tu novela ha hecho mis vacaciones *-*

    -Valery

    13 febrero, 2012 en 7:00

COMENTA AQUÍ! Por favor <3(: